No podía saberse, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó irregularidades por 2 mil 592 millones de pesos en la construcción del Tren Maya, con recursos ejercidos por el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur).
Se identificaron sobrecostos, pagos excesivos y deficiencias en la ejecución de la obra, lo que confirma las dudas sobre el manejo de los fondos del juguete de AMLO.
Próxima estación: Desesperanza.
Uno de los casos más significativos se encuentra en el Tramo 1, donde el costo contratado aumentó un 115 %, además de detectarse pagos inflados a contratistas y materiales por encima de los precios de mercado.
Solo en esta sección hay más de mil millones de pesos sin justificar. Situaciones similares se presentan en el Tramo 4, donde se hallaron irregularidades por 422.6 millones de pesos, y donde además se firmó un convenio para construir un hotel sin haberlo incluido en el análisis costo-beneficio del proyecto.
El alacrán clan clan…
En el Tramo 5, que va de Cancún a Playa del Carmen, la ASF identificó pagos en exceso por 15 millones de pesos en informes de supervisión. También se hallaron obras de drenaje con dimensiones menores a las estipuladas en los contratos y pavimentaciones de mala calidad sin que le tocaran un pelo a los responsables.
Por si alguien le quedaba duda de como se pagó la campaña a la presidencia de la lagartija disecada que tenemos de adorno en palacio nacional.
La magnitud de los recursos involucrados evidencia serias dudas sobre la correcta administración de los fondos públicos en esta y otras obras emblemáticas del gobierno cuatrero.